Iglesia de Santa Ana
ul. św. Anny 11
Gracias a la fundación de los profesores de la Academia de Cracovia y del rey Juan III Sobieski, así como al diseño del arquitecto holandés, hoy en día podemos admirar en Cracovia uno de los ejemplos más espléndidos del barroco tardío de Polonia.
La actual colegiata universitaria de Santa Ana fue fundada a caballo entre los siglos XVII y XVIII a iniciativa de los profesores de la universidad cercana, apoyados por el rey Juan III Sobieski, antiguo estudiante de la escuela. El arquitecto del templo, Tylman van Gameren, se inspiró en la iglesia Sant’Andrea Della Valle de Roma. La nueva iglesia, que agradaba los gustos de los académicos, tenía un aspecto mucho más suntuoso que el edificio que había existido en el mismo lugar anteriormente. Así se creó una de las edificaciones barrocas más espléndidas de Polonia. La impresionante fachada de la iglesia está muy bien expuesta y gracias a ello el templo salta a la vista, a pesar de estar ubicado en una calle estrecha cuya perspectiva estaba antiguamente incluso más cerrada ya que llegaba hasta la muralla municipal. La iglesia cuenta con tres naves. Su interior, ricamente ornamentado, es de verdad muy impresionante. Toda la estructura está coronada con una cúpula apoyada en pechinas decoradas con representaciones de las virtudes cardinales: Prudencia, Templanza, Justicia y Fortaleza.
En la iglesia se hallan sepulcros y epitafios de profesores de la universidad cracoviana, entre ellos la tumba de San Juan Cancio (fallecido en 1473), teólogo, graduado, profesor y patrón de la universidad. Hay muchas leyendas sobre el santo que muestran su sensibilidad por la miseria humana. Dicen que una vez le regaló su abrigo a un mendigo y luego lo encontró de nuevo en su propio armario. En otra ocasión, gracias a su oración una sirvienta recuperó el jarro que había roto. Tradicionalmente, cada año en octubre se lleva a cabo una procesión en homenaje a San Juan Cancio que cuenta con la participación de los profesores universitarios.
Al lado del sepulcro del santo se colocaron lanzas turcas (llamadas "bunchuk"), ganadas durante la victoriosa batalla de Viena de 1683, dirigida por el rey polaco Juan III Sobieski.
En la iglesia se encuentra un testimonio de la valentía de los profesores de la Universidad Jaguelónica: una estatua de Nicolás Copérnicus del año 1823 y, a la vez, homenaje al famoso graduado de esta universidad. El monumento fue fundado en la época en la que las obras del astrónomo se encontraban todavía en el listado de libros prohibidos de la iglesia católica.
En 1886, en la iglesia de Santa Ana contrajo matrimonio Helena Modrzejewska, gran actriz especializada en teatro de Shakespeare y repertorio trágico que tuvo éxito también en Estados Unidos donde era conocida como Helena Modjeska.
Véase también:
- la decoración de estuco esculpida por Baltazar Fontana
- las policromías ilusionistas (que parecen tridimensionales)
- la pintura de Santa Ana con la Virgen y el Niño del altar principal
- los órganos barrocos que han conservado su sonido original y se consideran los mejores de esta época en Cracovia